Hace mucho tiempo que las mujeres que luchan han logrado conquistar espacios para desarrollarse en una sociedad que suele invisibilizarlas. Así, la igualdad se viene disputando desde siempre y nunca ha sido un regalo! En ese sentido queremos saludar a todas las mujeres que luchan cada día para parar la olla, cuidar a su familia, lograr sus metas profesionales y ser líderes de esta comunidad copiapina.
Quisiéramosen este nuevo 8M recordar el caso de Griselda Hinojosa, una químico farmacéutica nacida en Copiapó el 20 de abril de 1875. Ella fue la primera mujer en obtener este título en Chile y ¿qué hizo? Regresó a Copiapó para fundar una farmacia y atender a la comunidad. No solo eso, también desarrolló una carrera epistolar y se dedicó a atender los problemas de su época. Defendió el derecho de las mujeres a acceder a la educación y ser
parte de la vida pública. Tenía ideas anticlericales, cuestionaba a la iglesia. Era una rebelde en un mundo lleno de hombres.
¿Cómo la recordamos los copiapinos y copiapinas? Pues sin ningún espacio dedicado a su
nombre y su memoria. Propondré que se nomine algún recinto municipal con el nombre de
Griselda. Ella es una referente en la historia de la conquista de las mujeres para acceder al
mundo de las ciencias y la salud. No puede ser que no haya un laboratorio, una calle o una
farmacia con su nombre.
Así mismo, el 8 de marzo, nos recuerda la importancia de la mujer en la historia del desierto.
Las mujeres que fueron a recorrer sus derroteros y criaron personas en lugares inhóspitos.
Aquí en este desierto que parece echado a la mano de dios, las mujeres eran capaces de
emprender en proyectos mineros, se asociaban y descubrían vetas que luego podían explotar.
La mujer copiapina, siempre ruda y dando cara a la adversidad.
Y por último, saludar la lucha de las compañeras que disputan los espacios de poder y que
reivindican la demanda de más seguridad para las mujeres. Atacama es un territorio peligroso
para las mujeres. ¿Dónde están los cuerpos de las mujeres asesinadas por Hugo Pastén?
¿Qué pasa con el aparato judicial que no lo resuelve? ¿Qué pasa con el gobierno?
Se puede ser de izquierda o derecha, de la clase dominante o la clase oprimida, pero siempre,
siempre, está funcionando la disputa entre los géneros y la necesidad de liberación del
patriarcado. A cuestionarnos más, y ser menos abusivos, a tener reales momentos de reflexión,
a eso nos invita a los hombres el movimiento de las mujeres. En este día de triste memoria,
pero regado de esperanzas, un saludo a las mujeres que derriban barreras.