Hace unos días hubo una manifestación en Caldera por parte de los alumnos de los liceos de la comuna, en relación a marcadas deficiencias en cuanto a infraestructura, malas condiciones de los locales (baños insalubres, no distancia física adecuada, etc.), discriminación en cuanto a cosas mundanas como corte o color de pelo, tipo de vestimenta, cierre de baños, impidiendo su uso y otras cosas, además de la falta de profesores lo que es significativo. El problema más serio es la situación provocada por la falta de atención a la salud mental de los alumnos, consideran que el bullying no está siendo observado. Esta es una situación que se repite en muchas ciudades de nuestro país, con matices mínimos.
Lo cierto es que la incorporación a la actividad presencial trae consigo una solución importante en relación con lo que es la salud mental, dado que el ser humano es fundamentalmente social y el hecho de estar confinados al reducido espacio de sus casas, con escasa conexión con el exterior, ha desacostumbrado a las actividades escolares propiamente tales, como el levantarse temprano, el encontrarse en el colegio, el reunirse en salas de clases, debiendo re-conocer a compañeros, tolerarse en sus interrelaciones, etc., esto ha hecho que la gente, en especial a los estudiantes se deban reacomodar su conducta, lo que ha traído problemas como violencia, bullying, acoso sexual, etc. Todo esto debiera haber estado en la agenda del profesorado y en particular del SLEP que es el principal responsable que las condiciones de reinicio de la actividad presencial hayan sido las adecuadas, como fue ampliamente demandado por los profesores mucho antes del inicio de las clases.
Hace pocos días en nuestra capital regional en dependencias del CORE Atacama, se realizó una reunión en la que participó la Directora Nacional del Servicio Local de Educación Pública, con la asistencia de la presidenta del comité asesor del SLEP Atacama y un representante del SLEP Huasco, en conjunto con la mayoría de los consejeros regionales de Atacama y su presidente.
La apreciación fue lapidaria, quedó en evidencia que ha habido una mala administración de los recursos por parte de los funcionarios del SLEP, lo que ha dado como resultado una falta total de funcionamiento de esta organización en lo que son las responsabilidades para las cuales ha sido creada. La presidenta del comité asesor evidenció la angustia e impotencia que la invade al no obtener respuesta del SLEP sobre todas las deficiencias y complicaciones que presentan los establecimientos educacionales en Atacama. Es cierto que no todos están en esta situación, pues hay algunos que han logrado funcionar adecuadamente, pero hay otros que están en un estado verdaderamente deplorable. La manifestación de Caldera es sólo una y dados los antecedentes, es muy probable que se presenten en el breve plazo nuevas jornadas de protesta en todas las ciudades de nuestra región:
El consejo se hizo un deber de colaborar para encontrar la solución a este grave problema, organizándose para desarrollar un plan que lleve a una solución, solicitando para ello la participación de la Secretaría Ministerial de Educación.